El mundo desde lo alto de un castillo…

Un paraíso al pie de un castillo

Días en los que necesitamos un respiro. Un punto de inflexión entre un antes, un ahora y un para siempre.

Días en los que sentimos que todo momento es ahora y todo va a salir bien.

Días en los que miras hacia la playa y observas el infinito sintiendo que puedes ser y hacer lo que quieras.

Últimamente estoy muy reflexiva – aunque no lo haya compartido con vosotros – y muchas veces me paro, miro hacia adelante y pienso «da igual lo que haya pasado, siempre se puede avanzar».

Pero no se trata solo de desearlo, sentirlo o anhelarlo. Las palabras y los pensamientos se los lleva el viento. Se trata de hacer.

Todos nos hemos sentido a veces estancados en nuestra vida perdidos en un mar de dudas, soñando con un futuro mejor; creyendo con todas nuestras fuerzas que si aguantamos el dolor durante un tiempo que se hace infinito al final llegará una recompensa. Habrá merecido la pena sufrir. Pero el tiempo es efímero y el presente un día se convierte en pasado, así que el dolor nunca es recompensado; siempre dejará una huella que se convertirá en cicatriz, cambiando nuestro carácter por el dolor pasado.

¿Y dónde queda entonces el ahora? Lo dejamos aparcado en un segundo plano, como si no fuera importante. La vida ya es bastante perra a veces y nos sorprende arrancando de nuestras entrañas la felicidad como para creer que hay algún tipo de dolor que es merecido. Ninguno lo es.

Quiero pensar que el hecho de que yo me sienta bien no depende de algún mágico presagio que me regalará el destino y que yo debo sentarme a esperar pacientemente. Me niego a esperar.

Se trata de sentir que cada día es especial o por lo menos productivo; sentir que haces algo y que no solo te sientas a esperar a que algo suceda.

Mis días son largos ahora… pero tengo mucho que hacer. Historias, proyectos y anhelos por cumplir.

Desde mi perspectiva, haré lo que tengo que hacer.

La sonrisa volverá a ser natural y genuina.

Porque voy a hacer que ocurra.

Voy a ser lo que quiera ser.

Sin más historias.

Porque sí.

Porque ver el mundo desde lo alto de un castillo te llena de esperanza.

SGS

4 respuestas a “El mundo desde lo alto de un castillo…

  1. sandrags1983 11 agosto, 2015 / 10:45 am

    Muchas gracias Rubén por tu comentario. Tienes toda la razón. Saludos! 😛

    Me gusta

Los comentarios están cerrados.